EN QUE BENEFICIA EL HÁBITO DE LA LECTURA EN LOS NIÑOS


El hábito de la lectura enriquece a quien lo práctica y qué mejor que inculcárselo a nuestros hijos. Los libros tienen que estar presentes en sus vidas al igual que sus juguetes, siempre al alcance de la mano y con gran variedad. Los beneficios que proporciona la lectura son inmediatos y duraderos, ya que permanecen para toda la vida.


¿En qué los beneficia?

La lectura no sólo es esencial para adquirir conocimientos y obtener información, sino que abre una puerta a la imaginación, al talento y al placer. En el momento de leer el niño convierte en ideas las palabras que lee, imagina lo que nunca ha visto ni vivido y se pone en el lugar de los personajes en lo que a emociones respecta, como en situaciones de peligro o de intriga. A su vez, a través de un libro se estimula su imaginación, se amplía su vocabulario y su nivel de escritura y se desarrolla su concentración.
Leer también incrementa su capacidad de escuchar, su sentido crítico y sus intereses. El niño que gusta de la lectura se divierte con un libro, se emociona y encuentra en sus páginas un momento de entretenimiento sin igual, en donde se deja llevar por las palabras en un viaje hacia nuevos mundos.

¿Qué deben leer?

Los libros ideales para niños desde 7 a 9 años son los de aventuras, misterios y magia. A esta edad comienzan a desarrollar el pensamiento analítico y la lógica; ahora los cuentos fantásticos le agradan porque saben que las situaciones no suceden así, y le permiten imaginar lo imposible. Ahora pueden leer textos más largos, con letra no tan grande como en años anteriores y hasta separados en capítulos, lo cual los ayudará a organizarse. En cuanto al lenguaje utilizado debe ser desde sencillo hasta con vocabulario superior, siempre y cuando los pequeños puedan comprender lo que leen sin ayuda del adulto.


¿Cómo inculcarles el deseo de leer?

El placer de la lectura puede no surgir de manera voluntaria. Entonces es momento de que nosotros, los padres, propiciemos el contacto de nuestros hijos con la literatura infantil, creando un ambiente favorable para hacer que el hábito nazca. Para ello es importante que seamos el mejor ejemplo para nuestros hijos, que nos vean leer y que vean que en la familia se dedica tiempo a la lectura. También deben escucharnos hablar sobre libros, ya sea comentando algo que leímos anoche o hablando de lo inesperado del desenlace de una novela.
También debemos interesarnos por los libros de nuestros pequeños, no sólo preguntarles de qué se trata o si les entretiene, sino leyéndolos nosotros mismos. De esta manera descubriremos un tipo de literatura llena de goce, que nos permitirá ricos intercambios con nuestros pequeños. Visitar juntos la biblioteca pública es una excelente opción para conocer títulos nuevos y hasta participar en actividades relacionadas con la lectura.
También es bueno que cuando salgan de paseo entren en librerías y tomen contacto con sus diferentes propuestas. Quizás en vez de un juguete van a empezar a pedir un libro. Todo esto se hace de manera gradual, sin presiones, ya que nunca debemos obligar a los chicos a leer si no tienen ganas, ni hacerles responder preguntas para saber si leyeron determinado libro.
Tampoco es adecuado esperar que les guste todo lo que nos gusta a nosotros, los adultos. Probablemente les compremos un libro que nos ha encantado de chicos y al niño no le agrade.



Sesiones y consultas

Dra. María Teresa Charún
Psicóloga Clínica Educativa
Master en Salud y Bienestar Comunitario 
Universidad Autónoma de Barcelona - España

Contacto

Celular 950 986 309
E-mail: unifam2013@gmail.com
Web: http://unifam.weebly.com

Comentarios

Entradas populares